*Las monomanías de un senador

Federico Nogueda

27 febrero 2017

Trazos noticias

Opinión 

Si algo sabe hacer el senador Armando Ríos Piter es llamar la atención, sabe hacer caer en la provocación y que hablen de él, a eso vino el pasado Miércoles al puerto, con línea o sin ella le encanta dar show.

Más que político es un experto en la relación pública la mayoría de sus presentaciones son como actuaciones de lo que según ha hecho y lo señala siempre haciéndose la víctima.

Comienza su carrera a lado de don Florencio Salazar Adame en el PRI, después se va al PAN, también siguiendo a don Florencio, para después irse al PRD acompañado a don Carlos Zeferino Torreblanca que lo hace secretario.

Pero como es experto en la relación pública no deja de tender lazos con los ex gobernadores del PRI, quien uno de ellos y con el apoyo del gobernador en ese entonces Zeferino lo logran colocar como diputado federal por la Costa Grande del estado, y sacrifican a don Servando Ayala de la Unión.

En esos momentos ya gozaba de una respetada popularidad aunque finalmente era más hechura priista que perredista, pero nadaba por todos lados como ha sido su característica del senador, al grado que estuvo a punto de ser candidato a gobernador tanto por el PRD o por el PRI.

En esos momentos los próceres del PRI especialmente se filtraba la versión que le interesaba  a otro ex gobernador René Juárez Cisneros hacerlo candidato por el PRI para asegurar la gubernatura al tricolor, ya que las encuestas le favorecían de calle, pero al final el PRI de tantos jaloneos tuvo su propio candidato.

 Pero la preguntan que todos se han hecho ¿por qué no fue candidato del PRD, si estaba arriba en las encuestas de preferencias? De acuerdo a su propia versión del senador, según que la candidatura estuvo sujeta a acuerdos, amarres y complicidades con los propios chuchos y el gobernador en turno ángel Aguirre.

No obstante, después de haber visto la carrera del senador que pasó por tres partidos, no creía en la ideología, ni sus principios de estatutos y se aliaba de acuerdo al principio maquiavélico que ‘El fin justifica los medios’, y prácticamente daba la impresión que se ofertaba a las circunstancias, suele ser difícil creer su propia versión.

Se sabe también en esos momentos y era secretos a voces que no mantenía buenas relaciones con el gobernador de ese momento Ángel Aguirre, ya que en la elección constitucional fue claro que no se la jugó con él.

¿Qué realmente lo que descarriló al senador Armando Ríos Piter, que hasta la fecha no concuerda con su personalidad política y parece que vive una gran decepción? La ambición en política es tan natural como necesaria.

Fueron dos momentos claves, el primero a no haber conseguido la gubernatura ni por el PRD, ni por el PRI, y quedarse de senador, la segunda donde vuelve hacer gala de su capacidad de relaciones públicas y en laza amistad, acuerdos con el círculo cercano y de confianza del presidente Peña Nieto.

Donde finalmente sale rebotado al no conseguir sus pretensiones o aspiraciones que eran ser candidato a jefe de Gobierno u otra vez buscar la gubernatura de Guerrero. Al principio iba bien su relación incluso hay anécdotas que en giras por Guerrero el presidente lo saludaba personalmente haciendo referencia al senador.

Hoy sale de su letargo y dice que buscará la presidencia de la república aunque quite votos a otros, pero que va con todo, aunque hay una fuerte visión que fue para lo que le alcanzó esa relación con el círculo cercano al presidente Peña Nieto, solo a venir a restar votos a otros. federicosol@yahoo.com.mx